canciones y karaoke

La canción es uno de los elementos principales en los que se basa nuestro aprendizaje. La voz es el instrumento más expresivo que tenemos y, aunque muchos de nuestros alumnos no han adquirido el  lenguaje, sí son capaces de interiorizar melodías y ritmos, ser sensibles a los sonidos y fraseos e incluso exteriorizar sus emociones o lo que sienten a través de otras partes de su cuerpo.

Nuestras canciones tradicionales de siempre son muy adecuadas para trabajar con los alumnos, debido a que tienen una cuadratura rítmica sencilla y las frases están muy bien marcadas, por lo que son fáciles de interiorizar. Por ejemplo: “Debajo de un botón”, “Tengo una muñeca vestida de azul”, “El barquito Chiquitito”, “ El corro de la patata”, “ Dónde están las llaves”… Además es una excelente manera de conectar con las tradiciones como hemos podido ver en el apartado “FOLKLORE”  de este blog.

Pero las canciones infantiles son infinitas y tenemos un repertorio grande para las diversas estaciones, épocas del año, animales, acciones… Lo importante es que nos gusten, nos motiven y las cantemos y las  sintamos con alegría en cada momento.

 

Es importante, cuando una canción ya está trabajada y la han interiorizado, trabajar con pausas. La pausa promueve la iniciativa de los alumnos a terminar la frase o palabra de la canción a través de la voz o de cualquier otro movimiento de su cuerpo, por lo que participan de forma activa, se ven protagonistas y disfrutan doblemente del momento musical. Creo que es muy importante con nuestros alumnos “más campeones” que sean activos en la musicoterapia, ya que la pasividad y la escucha es importante pero no hay nada como el poder expresarte tú mismo a través de tu cuerpo, tu mirada o tu voz si hay algo que te sugiere hacerlo.

Una actividad de centro que nos entusiasma y en la que participamos todos  es el karaoke.  Como he dicho anteriormente la voz es el instrumento más expresivo que tenemos y el más comunicativo y es muy importante que lo podamos desarrollar.

Se realiza mucho trabajo en el centro para que los chicos puedan expresarse vocalmente y puedan tener una buena  respiración, emisión, vocalización, dicción, impostación, entonación…

 

Así que, el contar con actividades como esta, hace que hagamos todo ese trabajo de una forma muy amena y divertida, sin que nos cueste esfuerzo,  y además nos da la oportunidad de expresar lo que sentimos, que normalmente es mucho.

El que no se haya  adquirido el lenguaje hablado no es problema en esta actividad, como ya he dicho otras veces, las formas  con las que nos podemos expresar son tan diversas  ( bimodal, gestual, cuerpo, mirada, comunicadores…), que simplemente escogeremos la opción que más nos interese para participar con todos en nuestro “Gran Karaoke”.

En esta actividad se puede ver en sus caras la motivación que tienen y lo que disfrutan. El sentirse protagonistas y el aplauso del público es un refuerzo que tiene un valor incalculable en nuestro desarrollo: aumenta nuestra confianza y autoestima, mandamos “a paseo” los complejos de inferioridad que podamos tener, nos comunicamos y nos expresamos y además nos lo pasamos genial haciéndolo. ¡Que más se puede pedir!